Detectores defectuosos de humo y monóxido de carbono

En marzo, la CPSC advirtió a los consumidores sobre un detector de CO diferente, ya que no emitía una alerta en presencia del gas. “Este es el tipo de situación —es decir, empresas

comerciales extranjeras que no han respondido a las solicitudes de retirar del mercado el producto—, que ha llevado a la CPSC a buscar empresas como Amazon para que se hagan responsables de

este tipo de productos”, dijo la agencia a AARP. “En efecto, la CPSC está en un litigio con Amazon respecto a tal circunstancia”. EL MONÓXIDO DE CARBONO Y LA SEGURIDAD CONTRA INCENDIOS El

CO es un gas mortal, inodoro e incoloro. Se encuentra en las emanaciones producidas por vehículos, estufas, linternas, parrillas, chimeneas, hornillas de gas y calefactores de gas. Cuando se

acumula en interiores, puede envenenar a las personas y a los animales que lo respiran, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. Los síntomas más comunes de la

intoxicación por CO son dolor de cabeza, mareo, debilidad, malestar estomacal, vómitos, dolor en el pecho y confusión. Respirar mucho CO puede provocar desmayos o la muerte. Las personas que

están durmiendo o que están bajo los efectos del alcohol o las drogas pueden morir de intoxicación por CO antes de presentar síntomas. Entretenimiento Paramount+ 10% de descuento en

cualquier plan de Paramount+ See more Entretenimiento offers > Al menos una vez al mes, se debe verificar que los detectores de humo funcionen correctamente. Además, se recomienda

reemplazar las baterías de los detectores de humo cada seis meses y reemplazar los detectores cada 10 años, según la National Fire Protection Agency (NFPA) Los adultos mayores, los bebés y

las personas con enfermedades cardíacas crónicas, anemia o problemas respiratorios tienen más probabilidades de enfermarse a causa del monóxido de carbono. Cada año el CO causa más de 400

muertes en EE.UU. que no están relacionadas con incendios, más de 20,000 visitas a las salas de emergencia y más de 4,000 hospitalizaciones. En los incendios residenciales, la mayoría de las

muertes se deben a la inhalación de humo y no al calor ni a las llamas. Algunos consejos para evitar la intoxicación por CO en tu casa son comprobar o reemplazar las pilas de tu detector de

CO en otoño y primavera, hacer que un técnico cualificado revise anualmente tus aparatos de calefacción, no utilizar calentadores químicos portátiles sin llama en el interior y asegurarte

de que los aparatos de gas y las chimeneas estén bien ventilados. Los detectores de CO y humo deben instalarse en cada nivel del hogar y afuera de cada dormitorio. Más de 2,390 personas en

Estados Unidos mueren cada año a causa de incendios en el hogar. En la mayoría de los casos, solo se tiene uno o dos minutos para escapar después de que suene la alarma de humo. El riesgo de

morir en un incendio se duplica en un hogar sin una alarma de humo que funcione. Para reportar un producto peligroso o una lesión relacionada con un producto, visita SaferProducts.gov (en

inglés). _Nota de redacción: este artículo se publicó el 13 de abril. Ha sido actualizada con nueva información._