Evolución audaz del superventas europeo | la verdad

CARMEN SAURA Sábado, 24 de mayo 2025, 10:39 Comenta Compartir El Hyundai Tucson siempre ha sido una de esas apuestas seguras del mercado SUV compacto. Con la actualización FL (facelift)

2024, la marca coreana no solo afina su imagen, sino que también da un paso adelante en tecnología y eficiencia. Tuvimos la oportunidad de ponernos al volante del Tucson 1.6T GDi de 160 CV

con hibridación ligera de 48 voltios y salimos con una impresión clara: Hyundai ha sabido escuchar al mercado y afinar un producto que ya era sobresaliente. Desde el primer vistazo, el

Tucson impone. Su nueva parrilla con luces diurnas led integradas crea una firma visual agresiva y moderna, reforzada por las líneas marcadas del capó y las nuevas llantas de 19 pulgadas de

diseño N Line (en nuestra unidad de pruebas). La trasera mantiene la franja led continua y un nuevo paragolpes que aporta solidez visual. Los cambios pueden parecer sutiles en fotos, pero en

directo el resultado es mucho más rotundo. Hyundai ha logrado renovar sin traicionar la identidad del modelo, y eso no es fácil en un mercado saturado de propuestas. Dentro del Tucson, el

rediseño se nota aún más. El salpicadero completamente nuevo apuesta por una doble pantalla de 12,3« que unifica el cuadro digital y el sistema multimedia. Todo se maneja con rapidez e

intuición, y aunque se mantiene una pantalla táctil, se agradece la presencia de botones físicos para la climatización, con buen tacto y accesibilidad. Los materiales, sin ser de lujo, están

bien ensamblados y transmiten solidez. La combinación de tela y cuero en la tapicería es agradable, y hay detalles prácticos por todas partes: carga inalámbrica, puertos USB-C, salidas de

aire para las plazas traseras y mucho espacio en la consola central gracias a la palanca shift-by-wire. FUERZA, EFICIENCIA Y UN PUNTO DE DINAMISMO Este nuevo motor 1.6T GDi de 160 CV con

hibridación ligera sustituye a las anteriores variantes de 150 y 180 CV. Y lo hace con nota. Asociado al cambio automático de doble embrague 7DCT, ofrece una respuesta suave y progresiva,

ideal para una conducción urbana o en carretera sin sobresaltos. El sistema microhíbrido actúa de forma prácticamente imperceptible, mejorando consumos sin comprometer sensaciones. En

ciudad, el sistema Start&Stop es eficaz y rápido, y se nota un mayor refinamiento general. En autopista, el motor mantiene cruceros con soltura y la insonorización está por encima de la

media del segmento. No es un coche para correr, pero tiene fuerza suficiente para adelantamientos y subidas con carga. El consumo medio en nuestra prueba se situó en torno a los 6,6 l/100

km, una cifra notable para un SUV de este tamaño y con tracción delantera. El sistema híbrido 48V aporta ese plus de eficiencia sin alterar la experiencia de conducción tradicional.

COMPORTAMIENTO Y CONFORT Uno de los aspectos más destacados es la calidad de rodadura. Gracias a la suspensión electrónica ECS disponible en acabados superiores (aunque no presente en

nuestra unidad), el Tucson ofrece un equilibrio excelente entre confort y estabilidad. Incluso sin ella, el conjunto muestra un aplomo destacable, con un filtrado de baches eficaz y un

balanceo contenido en curva. El modo Sport modifica ligeramente la respuesta del acelerador y la caja, pero el Tucson sigue siendo un coche enfocado al confort. Ideal para quienes valoran

una conducción serena pero segura. La dotación de seguridad es sobresaliente. De serie ya encontramos asistentes como el mantenimiento de carril, frenada de emergencia con detección de

peatones y ciclistas, control de crucero, detector de fatiga, cámara trasera, sensores, eCall... Y nuestra unidad contaba además con sistemas como el control de crucero inteligente (SCC),

asistencia en intersecciones y el sistema de advertencia de plazas traseras ocupadas. Todo funciona de forma fluida y no intrusiva, algo que no siempre ocurre en otros modelos. El Hyundai

Tucson convence por muchas razones: diseño atractivo, motor eficiente, gran dotación tecnológica y una conducción cómoda y segura. Su nueva motorización microhíbrida lo convierte en una

opción muy lógica para quien busca etiqueta ECO sin saltar aún a un híbrido completo o enchufable. Hyundai ha dado en el clavo: este Tucson no solo sigue siendo uno de los SUV más

equilibrados del mercado, ahora también está más preparado que nunca para mantenerse en lo más alto de las listas de ventas. Comenta Reporta un error