Badé abre la puerta a su salida del sevilla fc

La realidad del SEVILLA FC termina llevándose por delante cualquier deseo positivo de las personas que viven el día a día de cerca. Y los miembros de su plantilla no escapan a esa tozuda

sensación de que el proyecto deportivo va a seguir viviendo ... capítulos angustiosos, muy lejos de lo que sería deseable para los profesionales que llegaron o firmaron por los sevillistas

con la idea de crecer, jugar partidos históricos y hacerse mejores jugadores en el césped del RAMÓN SÁNCHEZ-PIZJUÁN. Un ejemplo claro es el de LOÏC BADÉ, quien ha vivido las dos caras de la

moneda en Nervión, llegando a ser uno de los futbolistas más importantes del equipo, pero terminando el curso en un bajísimo nivel, con la cabeza en otra parte y ya abierto a buscarse un

mejor destino donde continuar su carrera. El central ya abre la puerta sin tapujos a una buena propuesta económica y deportiva. Evidentemente, el club se la piensa abrir. No tiene más

remedio. Porque el francés, ahora concentrado con la selección absoluta de su país, en una llamada de DESCHAMPS que le viene de lujo al Sevilla, amplió y mejoró su contrato a lo largo del

presente ejercicio, elevando HASTA 2029 su relación contractual, además de aumentar su salario y la cláusula de rescisión (60 MILLONES). Se sentía en Sevilla como en ningún otro lugar y no

quería oír hablar de un traspaso. Siempre ha dejado claro que él era el único dueño de su futuro e incluso le molestaba que hubiese personas que se metieran en el mismo. Que daría los pasos

indicados a su tiempo, siempre y cuando hubiese decidido salir de NERVIÓN y la oferta que le llegase fuese de su agrado. El ejemplo de la personalidad que gasta BADÉ está bien cerca. El

Sevilla negoció en el mes de enero con el ASTON VILLA de UNAI EMERY Y MONCHI. Badé no era la primera opción de los villanos, pero llegaron a ofrecer alrededor de 30 MILLONES con los pluses.

A los sevillistas se le hacía la boca agua con esta posible plusvalía, pese al perjuicio deportivo. No llegó a buen puerto. El defensor galo dijo que no era momento de salir, que todavía

podía ayudar a conseguir una clasificación europea para su equipo. Nada de eso ha sucedido y la oportunidad de una primera gran venta se esfumó tras la negativa del jugador. BADÉ ESTÁ EN EL

MERCADO y sus agentes lo están moviendo. Se ha dado cuenta de que no tendrá un futuro brillante en su actual club por culpa de la situación deportiva que viven, además de que su traspaso

ayudará también a la maltrecha economía sevillista. DOS ETAPAS DISTINTAS LOÏC BADÉ aterrizó en el Sevilla en enero de 2023 con el equipo metido en un buen lío en Liga . Era el primer año de

los tres últimos donde las sensaciones en la competición doméstica comenzaban a señalar sin disimulo un declive en toda regla. BADÉ LLEGÓ PARA AYUDAR A SOLUCIONARLO Y SE SALVÓ LA TEMPORADA.

Vivió un cambio de entrenador mientras se iba adaptando bien al nuevo país, después de una cesión infructuosa en la Premier. Tal fue su crecimiento que, tras levantar la séptima Europa

League, MONCHI confirmaba su compra por 12 MILLONES. El central había encontrado su lugar en el mundo. Por esto mismo ha peleado tanto por no salir, puesto que se resistía a pensar que todo

se hubiese terminado tan pronto. Que ese idilio sevillista con sus profesionales que levantan títulos fuese a terminar de esta manera. De todos modos, con un escenario de venta generalizada

por simple necesidad, el SEVILLA deberá saber jugar sus cartas y que la depreciación que ha sufrido su plantilla no le afecte en las ventas más importantes de este verano. No puede regalar a

BADÉ por menos de lo que pudo sacar en enero. Está obligado a intentarlo. Es cierto que la amortización del futbolista, después de ampliación de contrato, no es tan gravosa, pero quedarse

con unos 20 MILLONES LIBRES de carga (una venta por encima de los 25) sería calificada como una gran operación. Y es que BADÉ no ha terminado bien el campeonato. Como epílogo, se terminó

despidiendo con una roja ante el REAL MADRID en el último partido como local, para no poder jugar la jornada final. Y no sólo eso, su nivel del último mes estaba muy lejos del ofrecido el

resto del curso. Le fue pesando ese peso de la responsabilidad de las últimas jornadas, tampoco entendiendo el cambio en el banquillo, ya que se había habituado al estilo de García Pimienta,

donde fue creciendo hasta creerse el líder natural del equipo. Eso ya pasó. Toca jugar con FRANCIA y descansar después. Badé está en el mercado. La puerta está abierta. El noviazgo no podía

durar para siempre.